Descubre qué hacer en Sierra Nevada este verano

El cierre de la temporada invernal no implica un punto final para la vida en Sierra Nevada. El Parque Natural y su estación de esquí ofrecen una amplia variedad de actividades con las que seguir descubriendo este paraje único durante el verano. Desde darse un buen baño a más de 2.000 metros de altitud disfrutando del sol de la sierra, hasta el entretenimiento de los más pequeños, sin olvidar las rutas de senderismo y en bicicleta con ascensiones a las principales cimas durante los meses de julio y agosto.

Ocio en Sierra Nevada: actividades de verano

La gama de actividades que Sierra Nevada ofrece a sus visitantes durante el verano está orientada a todo tipo de preferencias. Por ejemplo, los más pequeños tendrán la diversión asegurada en el Mirlo Blanco o en los campamentos veraniegos, aunque también se podrá disfrutar de un maravilloso día en familia con alguna de las rutas más sencillas. La oferta se expande también para los que buscan una aventura más excitante, con grandes itinerarios en los que conocer los picos con más de 3.000 de altitud de toda Sierra Nevada o circuitos en bicicleta eléctrica o de montaña. Incluso los amantes del cielo y la astronomía tienen su hueco en el estrellado cielo nocturno y en el observatorio.

Actividades en Sierra Nevada en verano, una gran opción para la familia

Uno de los principales reclamos durante el invierno para los más pequeños, la zona Mirlo Blanco, sigue abierta en los meses de verano, con una oferta de actividades diferentes como son las miniolimpiadas. Por otro lado, además de las rutas senderistas y la visita al centro de interpretación del Dornajo, las familias más intrépidas tendrán la oportunidad de disfrutar de ver amanecer o atardecer desde el pico Veleta. O, si lo que se busca es pasar un día más tranquilo, qué mejor que tomar el sol a 2.200 metros de altitud en la piscina climatizada de Pradollano.

Rutas de trekking e itinerarios en bicicleta por Sierra Nevada en verano

Los que busquen un desafío entre los riscos y picos de Sierra Nevada tendrán igualmente con una amplia gama de opciones. Desde excursiones de nivel intermedias hasta los que se atrevan con la culminación de ‘la integral’, una ruta de varios días recorriendo todos y cada uno de los picos con más de 3.000 de altitud del Parque Natural. Todas estas rutas se pueden dividir en dos grandes grupos, dependiendo de si el visitante prefiere el trekking o la bicicleta:

• Principales rutas de trekking: Además de la ‘Integral’ antes mencionada, que consta de cuatro días haciendo noche en varios refugios y haciendo cumbre en todos los tresmiles, quien prefiera una experiencia de un día también podrá ascender a Veleta y Mulhacén en una ruta de unas ocho horas. Los Machos, Elorrieta, los Tajos de la Virgen o las Lagunas son otras de las zonas que se pueden visitar, siempre acompañados de un guía.
• Principales itinerarios en bicicleta: Los amantes de las dos ruedas tienen igualmente su espacio en Sierra Nevada, con la posibilidad de alquilar tanto bicicletas tradicionales como eléctricas, así como el equipo de protección necesario. Las rutas tienen una duración de entre 1 y 4 horas, siendo algunas de las más representativas la subida al Veleta, la bajada al Maitena o visita a Diéchar, que termina en Monachil.

Sierra Nevada en periodo estival y el astroturismo

Uno de los principales reclamos de Sierra Nevada durante el verano es su observatorio astronómico. Situado en un enclave privilegiado permite a los investigadores desarrollar estudios únicos, pero no es su única función. En los últimos tiempos el astroturismo ha ido ganando relevancia y el Parque Natural cuenta con uno de los mejores y más limpios cielos de la península. Por ello no se puede dejar pasar la oportunidad de realizar talleres de observación astronómica u observar la lluvia de perseidas durante un fin de semana de total y absoluta astronomía que incluye ver el amanecer y el atardecer desde el veleta.

Una amplia oferta de campamentos de verano en Sierra Nevada

En Sierra Nevada tampoco podían faltar los campamentos de verano, tanto de ocio como deportivos. Los jóvenes podrán disfrutar de una amplia variedad de actividades en función de sus preferencias. Hay campamentos para aprender inglés mientras se entra en sintonía con la naturaleza, otros para la práctica del atletismo o la del triatlón, con una duración de entre una y dos semanas en las que se aúna aprendizaje y diversión a partes iguales.